El runner holístico

Cuando el otro día llegaba de correr algunos kilómetros pues ni sabía cuantos había hecho, durante el lance temporal, menor a una  hora.Y en el punto de salida y mientras estiraba de forma consciente (espalda en posición de descarga, y estirando músculos dinámicos entre 30 y 2 minutos cada uno de ellos),  otro deportista totalmente amateur, me preguntó... "Oye cuantos kilómetros has recorrido? Cuanto has tardado? Y que tiempo has invertido?  De forma rápida y espontanea le respondí: He visto diferentes tonalidades de verde, he respirado diferentes olores de hierba y plantas. He notado como el sol me calentaba lenta y agradablemente la piel, y como el aire suave me acariciaba la cara". Además en ningún momento me he notado pesado de piernas o abrumado por la poca oxigenación o presión pulmonar o intraabdominal durante la carrera. Además no llevaba reloj y no sé lo que he tardado, pues tampoco lo pretendia. Y él me respondió, estás bien? Y a su pregunta enunciativa le respondí rápida y afirmativamente: Pues claro, me siento muy bien, pero que mucho.

 Me gustaría aportar una visión del corredor o del practicante deportivo que vaya más allá de las distancias, y el reduccionismo del tiempo y la planificación del entrenamiento obtener un objetivo competitivo o de planificación para la obtención de un resultado (sean pruebas físicas específicas, o una marca). Una visión relajada, natural y espontanea del fluir de las zancadas, al mismo tiempo compenetrada con el hecho de poder escuchar el cuerpo como respira y recorre cada paso sin poner al límite al corazón, o la estructura muscular y fisiológica. Una visión holística.

 Soy realista y no quiero aportar una visión distorsionada, poética, o extravagante de lo que significa el running en todo el mundo. Simplemente quiero aportar una visión personal y respetable como cualquier otra, de lo que para mí simboliza el hecho de ir a correr.